______________pinchar para aumentar_______________Esta fotografía que encontré en internet, no sabría decir en que lugar, me resulta tan sugerente que no he podido dejar de referirme a ella. La elegí en principio para ilustrar un texto, un poema tal vez, pero fue tal su capacidad para causarme impresión que he querido mostrarla como protagonista de esta entrada.
No sé quién es el autor, y me gustaría saberlo, porque es una fotografía que expresa multitud de emociones y sensaciones. La fotografía podría llevar por título “Soledad” y sería entendible. También podría ser su título “Incomunicación”, o “Abandono”, o “Hacia el final de una historia”, o tantos y tantos títulos le cabrían que sería prolijo intentar escribirlos todos.
Es una fotografía que nos resulta, tristemente, reconocible. Alguna vez hemos estado a uno u otro lado de esa mesa. Alguna vez nos hemos sentido como uno u otro de los personajes. Porque hay dos personajes, aunque uno de ellos sólo esté implícito. Tal vez sea una imagen que se esté repitiendo en muchos lugares en este mismo momento.
La magia de esta fotografía, creo, reside en expresar muchas emociones desde una sola instantánea, desde un espacio quieto, inventado pero terriblemente doméstico y familiar. El poder de sugestión de esta fotografía no nos deja indiferente. Al menos a mí no me deja indiferente.
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